El método de riego es muy sencillo: Se retira el cuadro de la pared, se sitúa en posición horizontal y se agrega agua des del centro del diseño, para que vaya hidratándose toda la superficie de tierra. Por capilaridad, el agua llegará a todos los rincones del pequeño jardín vertical, permitiendo a las raíces absorber el agua. Se recomienda regar por las noche y dejar el cuadro en posición horizontal, hasta la mañana siguiente que podrá volver a su posición original.